Antioxidantes

Antioxidantes: Protección contra el envejecimiento

Escrito por: Ayleen Martinez

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Tiempo de lectura 4 min

Cuando nuestro cuerpo usa oxígeno para generar energía, se producen subproductos llamados radicales libres. Estos compuestos, pueden dañar nuestras células y acelerar el envejecimiento.

Los antioxidantes son sustancias que ayudan a neutralizar estos radicales libres. Ellos previenen el daño celular y pueden corregir los daños ya causados.

Los antioxidantes incluyen vitaminas, minerales, hierbas y otros compuestos presentes en los alimentos y suplementos. Estos ayudan a combatir el daño celular, a prevenir el envejecimiento y diversas enfermedades.

Contenidos

¿Quiénes deberían consumir antioxidantes? Algunos ejemplos de antioxidantes son: ¿Cómo potenciar la biodisponibilidad de estos antioxidantes? Conclusión

¿Quiénes deberían consumir antioxidantes?

Aunque todos necesitamos una dosis diaria de antioxidantes para mantener un equilibrio celular saludable, ciertas personas pueden beneficiarse más de su consumo. Aquellos que están expuestos de forma regular a factores como el humo del cigarrillo, la contaminación ambiental o la radiación ultravioleta del sol, tienen una mayor necesidad de antioxidantes. Estos agentes pueden aumentar el daño oxidativo en el cuerpo, por lo que una ingesta adecuada de antioxidantes puede ayudar a proteger las células y prevenir enfermedades relacionadas con este daño.

Algunos ejemplos de antioxidantes son:

Vitamina C : El más conocido de los antioxidantes, es hidrosoluble lo que significa que se disuelve en agua y, por lo tanto, cualquier exceso de esta vitamina es eliminado del organismo a través de la orina. Tras su absorción, su concentración en sangre tiende a disminuir después de aproximadamente 4-5 horas. Es por esta razón que se recomienda su consumo aproximadamente cada 4-5 horas para mantener niveles óptimos en el organismo. Dentro de sus principales propiedades esta proteger las células, mejorar el sistema inmunológico, mejorar la absorción del hierro y colaborar en la formación de colágeno. 

Glutatión : El glutatión es uno de los antioxidantes más importantes en el cuerpo, se almacena principalmente en el hígado y juega un papel crucial en la detoxificación, la protección contra el daño celular y la regulación del sistema inmunológico. Estudios recientes sugieren que el glutatión puede mejorar la salud hepática, reducir la inflamación y proteger contra enfermedades neurodegenerativas. Para aumentar la biodisponibilidad del glutatión en forma de suplemento, debe estar en su forma reducida y liposomal. 

Coenzima Q10 : Es un antioxidante liposoluble que se encuentra en todas las células del cuerpo, desempeñando un papel clave en la producción de energía celular. Estudios recientes indican que puede mejorar la salud cardiovascular, reducir la fatiga y promover la salud de la piel.

Vitamina E : Antioxidante liposoluble que protege las células del daño oxidativo y apoya el sistema inmunológico. Se ha demostrado que mejora la salud de la piel, la salud ocular, reduce la inflamación y tiene efectos beneficiosos en la salud cardiovascular.

Azafrán: Es una especia rica en compuestos antioxidantes que ha demostrado tener efectos antiinflamatorios y neuroprotectores. Estudios recientes sugieren que el azafrán puede mejorar el estado de ánimo, reducir la ansiedad, y beneficiar la salud ocular y cardiovascular.

¿Cómo potenciar la biodisponibilidad de estos antioxidantes?

Los antioxidantes hidrosolubles como es el caso de la Vitamina C se disuelven en agua por ende no se almacena en el cuerpo, por lo que debe ser consumida regularmente durante el día cada 4-5 horas.

En el caso de los antioxidantes liposolubles , estos se disuelven en grasas y aceites, por ende se absorben mejor cuando hay presencia de lípidos en el tracto digestivo. Se almacenan en el hígado y los tejidos grasos del cuerpo, por lo que se aconseja consumir alimentos ricos en aceite como palta, huevo, frutos secos, aceitunas, aceite de oliva, aceite de coco, etc. en conjunto con estos suplementos antioxidantes para mejorar su biodisponibilidad.

Conclusión

Incluir antioxidantes en nuestra dieta es fundamental para proteger las células del daño oxidativo y prevenir enfermedades relacionadas con el envejecimiento y otros trastornos. Los alimentos ricos en antioxidantes, como frutas, verduras, legumbres, frutos secos, pescados y grasas saludables, proporcionan una amplia gama de beneficios para la salud, por lo que es esencial mantener una alimentación variada y equilibrada.

En cuanto a los suplementos antioxidantes, incorporar una variedad de ellos puede potenciar significativamente sus efectos protectores y optimizar la salud celular de manera más integral. Cada antioxidante tiene un mecanismo único de acción, por lo que Incorporar diversos antioxidantes en nuestra rutina diaria, permite abordar diferentes tipos de daño celular y maximizar los beneficios para la salud a largo plazo. Adoptar esta estrategia equilibrada es fundamental para mejorar la salud general y promover una longevidad saludable.

Mujer de 30 años, nutricionista, con cabello café

Ayleen Martinez

Nutricionista Ortomolecular

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